Estas empanadillas o börek de pasta filo son crujientes y ligeras porque se hacen al horno con muy poco aceite. Las he rellenado de espinacas y requesón pero puedes sustituir el requesón por queso feta si quieres un sabor a queso más intenso y quedará también muy bueno.
La pasta filo da un montón de juego tanto para platos salados como dulces y es una buena alternativa al hojaldre o a la masa de empanadillas si quieres hacer platos más ligeros.
Las espinacas tienen muy pocas calorías, un alto contenido en fibra y son diuréticas con lo que se recomiendan para dietas de control de peso. Es una buena fuente de provitamina A con lo que contribuye a mantener un buen estado de la piel, el cabello y los huesos. Además es antioxidante y se recomienda a las embarazadas por su contenido en folatos.
INGREDIENTES
-Pasta filo
-300 gr de espinacas frescas
-200 gr de requesón 0% m.g.
-2 dientes de ajo
-Aceite de oliva virgen extra
-Sal y pimienta
-Sésamo crudo
-1 clara de huevo
PASO A PASO
Precalienta el horno con calor arriba y abajo a 180ºC
1/En una sartén a fuego medio fríe dos ajos picados en un poco de aceite de oliva virgen extra. Cuando tengan color dorado, añade las espinacas y un poco de sal y pimienta. Cuidado con la cantidad de sal porque las espinacas pierden mucho volumen al saltearlas.Cuando estén bien salteadas y hayan perdido el agua, las reservamos y dejamos que pierdan el calor.
2/Escurrimos el requesón en un colador para que pierda el exceso de agua. Le añadimos sal y pimienta. Lo mezclamos con las espinacas.
3/Pintamos la hojas de filo con un poco de clara de huevo batida. Rellenamos con la mezcla de espinacas y las envolvemos formando triángulos o la forma que más nos guste. Te enseño como los he formado:
4/Con un spray de aceite o con la ayuda de un pincel, pintamos con un poco de aceite los triángulos, los espolvoreamos con sésamo y los metemos al horno hasta que queden dorados.