Hace tiempo compartí con vosotros la receta de los espaguetis de calabacín, es una forma diferente de comer calabacín que da mucho juego. Sobre todo para la gente que no puede comer pasta de trigo o para los que están a dieta y quieren sustituir el plato de pasta por algo más ligero. Es una buena alternativa para las cenas, porque da sensación de saciedad y en realidad el calabacín es una verdura muy ligera.

Esta vez os traigo una receta diferente, un pesto rojo, que al igual que el pesto de albahaca, se puede utilizar para dar sabor a un montón de recetas diferentes. Una vez hecho, se conserva bastantes días en un bote en la nevera y se lo puedes añadir a carnes, pastas, verduras a la plancha, sándwiches…

Para cortar los calabacines hay varios utensilios en el mercado, el espiralizer es el más rápido para hacer espirales de verdura pero también el que más ocupa en la cocina. Hay algunos con forma de sacapuntas que también funcionan bien y son bastante más pequeños y si no, siempre puedes cortar el calabacín con un pelador de patatas o una mandolina, tardarás un poco más pero el resultado será igual de bueno.

El calabacín es un 95% agua, contiene vitamina C, disminuye la presión arterial, es un poderosos antiinflamatorio y antioxidante y ayuda a mejorar la concentración.

 

INGREDIENTES

– 2 calabacines♥

-1 tarro pequeño de tomates secos en aceite (unos 100 gr)

-50 gr de almendra♥ cruda pelada

-2 ajos♥

-Queso parmesano

-Aceite de oliva virgen extra♥

PASO A PASO

1/ Preparamos los espaguetis de calabacín.

2/En una sartén  ponemos a tostar unas almendras a fuego medio hasta que estén doradas. Las retiramos del fuego.

3/En el vaso de la batidora ponemos las almendras tostadas, los tomates secos en aceite, un trozo de queso rallado y un chorro generoso de aceite de oliva virgen. Trituramos. Tenemos que tener una pasta ligera, así que vamos añadiendo aceite hasta tener la densidad deseada.

4/Volvemos a poner la sartén al fuego con un chorrito de aceite, cuando esté caliente añadimos los dos ajos picado y dejamos que se doren. Cuando estén dorados añadimos el calabacín y a fuego alto lo saltemos un par de minutos. No hace falta que se haga muchos, está mejor si queda un poco al dente. Añadimos un poco de sal y de pimienta.

5/Por último  añadimos un par de cucharadas del pesto rojo.

6/Servimos acompañado de más pesto y de unas lascas de parmesano. También podemos añadirle alguna hierba aromática como orégano o albahaca.