Llega el buen tiempo y apetece desayunar cosas frías. Aunque me encanta desayunar gachas de avena con leche y canela y las desayuno todos los días, ahora que empieza a hacer calor el cuerpo me pide algo más fresco para desayunar. Así que hoy he preparado esta granola para poder desayunar toda esta semana que viene. La granola es muy fácil de hacer, está buenísima y es una alternativa saludable a los cereales industriales. También la puedes añadir al yogurt para comerla de postre o merienda.
A mí me gusta combinar los copos finos con los gruesos para que se formen pegotillos más crujientes pero también puedes usar solo avena gruesa o sustituirla por otro cereal que te guste más.
Si quieres que te quede suelto, al hornearla debes dejarlo extendido y remover varias veces mientras se hornea. En mi caso, que me gusta que quede en trocitos, lo compacto bien al hornear y luego lo parto en trocitos del tamaño que quiera con la mano.
La crema de avellanas la venden en tiendas de dietética o de productos bio, si no encuentras puedes utilizar crema de almendras o sustituirla por más cantidad de miel o agave.
La avena es rica en fibra con lo que ayuda a reducir el colesterol, reduce el nivel de azúcar en sangre, es una excelente fuente de energía, es digestiva y facilita el tránsito intestinal, ayuda a controlar el apetito y el peso, ayuda al funcionamiento del sistema nervioso, reduce el riesgo de enfermedades del corazón y es una buena fuente de proteínas y aminoácidos esenciales.
INGREDIENTES
– 250gr de copos de avena gruesa♥
– 250gr de copos de avena fina♥
– 4 cucharadas de miel o sirope de agave♥
– 4 cucharadas de crema de avellanas
– 150gr de avellanas♥ crudas
– 100gr de chips de chocolate con leche
PASO A PASO
1/ Calentamos unos pocos segundos en el microondas la miel y la crema de avellanas para que queden diluidas.
2/En un bol, mezclamos las dos avenas y añadimos la miel y la crema de avellanas. Lo mezclamos bien para que quede pegajoso.
3/Horneamos sobre papel de cocina a 180ºC con calor arriba y abajo hasta que esté dorado.
4/Dejamos enfriar por completo.
5/Añadimos el chocolate en trocitos y las avellanas troceadas.
6/Guardamos en un bote hermético para que nos dure crujiente toda la semana.
